Después de que la NASA no supiera con exactitud el lugar donde caería el satélite UARS, hecho que provocó incertidumbre en la gente, pues muchos pensaban que alguno de sus fragmentos podría alcanzar a una persona, posibilidad que según la NASA era muy remota; por fin se confirmó la zona donde impactó finalmente, y esta fue en el mar lejos de tierra evitando cualquier tipo de perdida material y humana.
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| UARS |
Según la NASA, el satélite ingresó a la atmósfera terrestre sobre el Océano Pacífico a 14.1 grados latitud sur y 170.2 grados longitud oeste, es decir, en el mar, poniendo fin a todo riesgo que se venía comentando en diversos sitios y medios de información en relación a la caída del artefacto debido a la inestabilidad en su trayectoria.
La caída se registro el sábado 24 de septiembre a las 4:01 GTM, en la que el satélite de 5.5 toneladas de peso trás concluir casi seis años de vida útil terminó por quemarse en la atmósfera la mayor parte del mismo y el resto se despedazó en 26 partes que alcanzaron el mar.
Así fue como finalizó el satélite transportado por el transbordador espacial Discovery en 1991 cuyo objetivo fue medir los cambios atmosféricos y los efectos de la contaminación en nuestro planeta.
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